5. Transporta inteligentemente: ahorra mientras te movilizas
El transporte puede ser una de las áreas más costosas dentro de un presupuesto familiar, especialmente si usas vehículo propio. Sin embargo, hay formas inteligentes de reducir estos costos sin sacrificar comodidad.
Usa transporte público: En ciudades como Buenos Aires, el transporte público es una alternativa económica y eficiente. La tarjeta SUBE, por ejemplo, ofrece descuentos para estudiantes, jubilados y trabajadores, reduciendo considerablemente el costo de moverse por la ciudad.
Caminatas y bicicletas: Para distancias cortas, considera caminar o usar bicicleta. No solo es más económico, sino que también mejora tu salud y reduce tu impacto ambiental. Muchas ciudades cuentan con ciclovías y programas de bicicletas públicas que facilitan este modo de transporte.
Compartir vehículos: Apps como Uber, Cabify o servicios de carpooling permiten dividir los costos de un viaje entre varias personas, haciendo el transporte privado más accesible. Además, compartir vehículos con compañeros de trabajo puede ser una excelente forma de ahorrar en combustible y estacionamiento.
Cambiar pequeños hábitos, como usar transporte público en lugar de un auto privado, puede generar ahorros significativos. Por ejemplo, eliminar gastos como combustible, peajes y mantenimiento puede representar un ahorro mensual de hasta $20,000 ARS. Al optimizar tu transporte, no solo cuidas tu economía, sino también el medio ambiente y tu bienestar físico.
